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domingo, 14 de agosto de 2022

ZANAHORIAS EN ESCABECHE DE COCO Y CAFÉ 




Que recetón os traigo hoy.

De verdad, hacerlo porque está increíble. Es sencilla, se hace rápido y la mezcla de sabores os va a sorprender y mucho, para bien. 

Tiene la ventaja que como todo escabeche, debe reposar al menos 24 horas, así que podéis hacerla con antelación. 

Comprar las zanahorias en un manojo, son bastante mejores de sabor, de tamaño mas similar entre sí y además la presentación queda más bonita quedándo un trocito del tallo que sirve además para cogerlas y comerlas a bocados. 




Para ésta receta lo ideal serían zanahorias baby pero como en mi ciudad son difíciles de encontrar, (¡Lo que añoro un mercado de abastos!) escojo un manojo lo más pequeñas posible y después las he cortado al medio, a lo largo (en las fotos de la elaboración lo veis bien).

El resto de ingredientes son sencillos y los tenéis en cualquier supermercado o tienda de alimentación. 

Ya sabéis que la zanahoria es baja en grasas y proteínas y rica en carbohidratos, así cómo en retinol y carotenos. 

Fuente de vitaminas, sobre todo del grupo B, muy necesaria para la vista.





Las zanahorias más antiguas provienen de Oriente y eran de color púrpura o amarillas. Las anaranjadas surgieron en Europa en el siglo XVI, aunque ahora podemos encontrar en los mercados además de la tradicional, para nosotros naranja, púrpura, amarilla, blancas o rojas. 

Tienen la ventaja de poder comerse guisadas como crudas. A mi nunca me han gustado las zanahorias muy cocidas (en general no me gustan las verduras demasiado cocidas), me encantan crudas y me acostumbré a ponerlas en los guisos en el ultimo momento para que queden al dente. Acostumbré a mi familia a comerlas así, incluso cuando tengo invitados les gusta el punto de mis zanahorias.

Y vámonos ya a la cocina!


INGREDIENTES 




Un manojo de zanahorias babys o de tamaño mediano 

Una lata de leche de coco 

dos cucharadas de vinagre de arroz 

60 ml de vinagre de jerez 

35 ml de agua 

250 ml (un vaso tamaño agua) de aceite de oliva virgen extra sabor suave

3 estrellas de anís 

Una hoja de laurel 

1/2 cucharada de comino en grano 

1/2 cucharada de curry 

1/2 cucharadita de pimentón de la Vera picante 

una pizca de azafrán 

una cucharadita de pimentón de la Vera, agridulce 

una cucharada de sal 

Una cucharada de café en grano 

Rematar con unas hierbas aromáticas y un poco de café molido 


ELABORACIÓN 




Quitar las hojas de las zanahorias dejando dos cm del tallo 

 Pelarlas con un pelador y lavar. Si las comprais de tamaño baby, no hará falta pelarlas, será suficiente con lavarlas bien.

Las más pequeñas dejarlas enteras y las medianas cortar a la mitad a lo largo 

En una cazuela que quepan bien las zanahorias sin doblarlas ni romperse, poner todos los ingredientes, menos la leche de coco. Y llevar a ebullición.




Cuando rompa el hervor, incorporar las zanahorias y la leche de coco.

Esperar que rompa el hervor de nuevo, dejar cocer unos 8 minutos, tapar la cazuela, apagar el fuego y dejar enfriar. Si las zanahorias eran babys, no hay que cocerlas, simplemente tapar la olla y apagar el fuego.

• Cuando enfríen meter en la nevera hasta el día siguiente. Podéis dejarla en la misma cazuela o pasarlas a un táper.




Pasadas 24 horas para servirlas, sacarlas del escabeche, ir colocándolas en un fuente. Colar el escabeche y pasar el líquido resultante a un bol amplio y hondo . Con ayuda de una batidora de varilla emulsionar . 

Verter el escabeche emulsionado sobre las zanahorias, espolvorear un poco de café molido y decorar con unas hierbas aromáticas (yo hoy he puesto salvia), estrellas de anís y unos granos de café.  


CONSEJOS 



Por si os sirve, yo utilizo unas latas de leche de coco de Mercadona, marca hacendado. En invierno puede ser que cuando abráis la lata esté muy cuajada. Poner la lata abierta, al baño María y vais removiendo con un tenedor hasta que la mezcla esté homogeneizada y ya podéis utilizarla.

El picante es opcional. La media cucharadita que he puesto apenas se nota, pero podéis no ponerle o poner más cantidad si os gusta. También podéis sustituir el pimentón por Chile en polvo o una guindilla 

El café en grano también es opcional pero si lo ponéis, al cocer con el resto de ingredientes potencia el sabor a café del escabeche.

Las hierbas aromáticas son sólo para decorar y poner un toque de verde. Yo hoy he puesto salvia, pero podéis poner romero o una ramita de hierbabuena o menta. 

El café molido si es importante que se lo pongáis por encima. Es lo que en cada muerdo os va a dar además de sabor, aroma a café.  Puede ser el que utilicéis en casa habitualmente. Descafeinado, con cafeína, igual da. 


Espero que os guste, muy recomendable ésta receta. De verdad .

🌱🌱🌱















 






domingo, 7 de agosto de 2022

MARMITAKO DE BONITO 




Aunque estemos en pleno agosto, con unas temperaturas altísimas y apetezcan más platos fríos, este guiso hay que prepararlo ahora que es temporada de bonito.

Lo más importante de este pescado es cocinarlo muy poco para que no resulte reseco. 

Admite múltiples preparaciones, desde hacer una conserva de bonito en aceite y tenerlo para todo el año, hasta diferentes guisos. Está muy rico con tomate, o un marmitako como el que traigo hoy.

Es un guiso con patatas tipico de la cocina vasca.




También podemos hacerlo a la plancha, pero para ésta preparación lo mejor es utilizar la ventresca que es la parte más jugosa y sabrosa del bonito. 

Muy rico también en un escabeche y después utilizarlo junto con unos pimientos italianos fritos para hacer una tortilla de bonito y pimientos. Una delicia. 

Nos ponemos el delantal y nos vamos a preparar un plato de cuchara de los de toda la vida. 


INGREDIENTES (para 4 personas) 




800 g de bonito en una rodaja gruesa 

800 g de patatas

1/2 pimiento rojo 

1/2 pimiento verde 

una cebolla pequeña o media grande 

3 dientes de ajo 

2 tomates maduros 

Una guindilla pequeña (opcional)

Una cucharada de pimentón de la Vera

125 ml (medio vaso tamaño agua) de vino blanco tipo Montilla 

• La carne de dos pimientos choriceros o una cucharada de pasta de pimiento choricero  

550 ml de caldo de pescado (algo más de medio litro) 

Aceite y sal


ELABORACIÓN 



 • Poner a remojar los pimientos choriceros en agua fría la noche anterior o una hora antes en agua hirviendo. Después extraer su carne y reservar. Si compráis la pasta de pimiento ya preparada os olvidais de este paso

 Quitar las piel y la espina a la rodaja de bonito y cortar en tacos como de 3 x 3 cm. O pedir en la pescadería que os lo preparen. 

En una cacerola poner un fondo de aceite y sofreír la cebolla y el ajo muy picaditos. Cuando la cebolla empiece a estar transparente añadir los pimientos también troceados y la guindilla en caso que la utileceis y dejar sofreír todo a fuego lento. Sin prisas.

Incorporar los tomates pelados y cortaditos, bajar el fuego, salpimentar y dejar que se haga un buen sofrito. 

Poner ahora las patatas peladas y chascadas, remover. Añadir la carne del pimiento choricero y el pimentón mezclando con rapidez para que éste último no se queme y verter el vino. Dejar cocer a fuego fuerte hasta que evapore el alcohol. 

Incorporar el caldo de pescado que debe estar hirviendo, probar y rectificar de sal si fuera necesario. Tapar la olla y dejar cocer a fuego lento.  Mover la cacerola de vez en cuando con movimientos circulares cogiéndola por las asas, para que se vaya haciendo una rica salsa. 

Cuando las patatas estén cocidas, poner los tacos de bonitos. Tapar la olla y apagar el fuego. Dejar reposar unos diez minutos antes de comer.El calor residual es más que suficiente para que el bonito se haga sin resecarse y quede jugoso. 




Que lo disfrutéis 

🌱🌱🌱